Sabiduría de Kung Fu Panda
Creo firmemente que las películas encierran grandes mensaje de sabiduría. Algunas frases de películas se me quedan tan grabadas que las uso para explicar eventos históricos:
"Te conviertes en lo que juraste destruir" (Star Wars) Aplicable en las historias de la mayoría de los caudillos y revolucionarios que se levantan en contra del régimen, solo para terminar actuando 'pior' (no que yo quiera pisar callos, verdad, pero un Fidel Castro o un Paul Kagame se me vienen a la mente).
Otra:
"O mueres como un héroe, o vives lo suficiente para verte convertido en villano" (Batman). Súper cierto en la historia de Benito Juárez -muere después de reelegirse solo 1 vez 'formalmente', por lo tanto muere como un héroe, de haber seguido vivo, seguramente no lo recordaríamos como San Benito Juárez (jiji, no creo que le guste que lo recordemos así pero you know what I mean), sino como un Porfirio Díaz cualquiera (quien vive lo suficiente para verse convertido en 'villano' con tanta reelección que finalmente harta a Madero y pues ya saben todo lo que pasa)-.
Sin embargo, una de las frases de película que, creo yo, mejor explican la vida es...cha cha chan:
"Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo" (Kung Fu Panda). (Creo la frase en sí es Jean de la Fontaine pero no sé por qué siento que tiene más push al venir de Kung Fu Panda).
Para empezar, no, no creo que tengamos un 'destino' ineludible o que seamos una especie de títeres de Dios (o de la vida). Creo en un Dios que ama nuestra libertad y que se fascina en ver 'qué nueva aventura emprenderemos'. Sin embargo, sí creo (y esto es una creencia personal, claro) que cada uno y cada una traemos dentro una serie de 'pistas secretas' para nuestra vida, una especie de mapa que guía al tesoro. Estas pistas tienen que ver con nuestros anhelos más profundos, con aquellas cosas que hacemos en donde sentimos que fluimos perfectamente con la vida y con nuestras experiencias de vida.
Como ejemplo sencillito, hace poco hablaba con una amiga de Colombia (pero que vive en México por cuestiones laborales. Su trabajo es padrísimo pues involucra diseñar talleres de crecimiento espiritual y asesorar en técnicas de acompañamiento), quien decía que irónicamente no había querido vivir en Bogotá (en su natal Colombia) porque era una ciudad fría (en parámetros colombianos). Sin embargo, el no vivir en Bogotá la llevó a trabajar en proyectos de pastoral que finalmente la trajeron a vivir a la Ciudad de México (una ciudad aún más fría que Bogotá, en parámetros colombianos). 'Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo'.
Otro ejemplo: por años yo le huí a la vida religiosa. Cuando estaba a punto de vivir una experiencia en un convento (literal a 3 días de irme con la congregación), me ofrecieron el trabajo de mis sueños. Para no hacer el cuento largo, tomé ese trabajo (en parte como 'escape' del convento). Años después, en medio del ajetreo del trabajo tomado, volvió la semilla de la vida religiosa, y 4 años después de aquel primer intento, pedí mi ingreso a la congregación (ahora ya no estoy en esa comunidad, pero... vivo en un convento sin ser monja, aunque esa es otra historia...). 'Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo'.
Y tal vez la sabiduría de Kung Fu Panda aplica para las sociedades también. En el 2018 se 'castigó' a los partidos políticos de siempre y se le dio la confianza del voto popular (al fin, pues vaya que el hombre perseveró) a Andrés Manuel. Muchos tal vez pensaron(mos) que dejaríamos de ser 'cachorros del imperio' (jiji), entre otras cosas, pero nada, ahora hasta más amiguitos de Trump somos. 'Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo'.
Definitivamente no creo que nuestro 'destino' sea ser 'el patio de atrás' de nadie, pero a lo que voy es que hay ocasiones en que 'todos los caminos llevan a Roma'. O que ciertas cosas 'iban a pasar sí o sí'. Voy concluyendo con esa coloquial frase de 'lo que es para ti, aunque te quites, y lo que no, aunque te pongas'.
¿Será que hay cosas que 'tenían que ser'? ¿Será que hay factores de personalidad, de historia de vida, incluso de geografía que limitan el abanico de opciones que tenemos, 'condenándonos' (benditamente, algunas veces) a no poder escapar de ciertas situaciones? ¿O serán solo cosas curiosas de la vida?
O tal vez solo espero demasiado de Kung Fu Panda...
"Te conviertes en lo que juraste destruir" (Star Wars) Aplicable en las historias de la mayoría de los caudillos y revolucionarios que se levantan en contra del régimen, solo para terminar actuando 'pior' (no que yo quiera pisar callos, verdad, pero un Fidel Castro o un Paul Kagame se me vienen a la mente).
Otra:
"O mueres como un héroe, o vives lo suficiente para verte convertido en villano" (Batman). Súper cierto en la historia de Benito Juárez -muere después de reelegirse solo 1 vez 'formalmente', por lo tanto muere como un héroe, de haber seguido vivo, seguramente no lo recordaríamos como San Benito Juárez (jiji, no creo que le guste que lo recordemos así pero you know what I mean), sino como un Porfirio Díaz cualquiera (quien vive lo suficiente para verse convertido en 'villano' con tanta reelección que finalmente harta a Madero y pues ya saben todo lo que pasa)-.
Sin embargo, una de las frases de película que, creo yo, mejor explican la vida es...cha cha chan:
"Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo" (Kung Fu Panda). (Creo la frase en sí es Jean de la Fontaine pero no sé por qué siento que tiene más push al venir de Kung Fu Panda).
Para empezar, no, no creo que tengamos un 'destino' ineludible o que seamos una especie de títeres de Dios (o de la vida). Creo en un Dios que ama nuestra libertad y que se fascina en ver 'qué nueva aventura emprenderemos'. Sin embargo, sí creo (y esto es una creencia personal, claro) que cada uno y cada una traemos dentro una serie de 'pistas secretas' para nuestra vida, una especie de mapa que guía al tesoro. Estas pistas tienen que ver con nuestros anhelos más profundos, con aquellas cosas que hacemos en donde sentimos que fluimos perfectamente con la vida y con nuestras experiencias de vida.
Como ejemplo sencillito, hace poco hablaba con una amiga de Colombia (pero que vive en México por cuestiones laborales. Su trabajo es padrísimo pues involucra diseñar talleres de crecimiento espiritual y asesorar en técnicas de acompañamiento), quien decía que irónicamente no había querido vivir en Bogotá (en su natal Colombia) porque era una ciudad fría (en parámetros colombianos). Sin embargo, el no vivir en Bogotá la llevó a trabajar en proyectos de pastoral que finalmente la trajeron a vivir a la Ciudad de México (una ciudad aún más fría que Bogotá, en parámetros colombianos). 'Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo'.
Otro ejemplo: por años yo le huí a la vida religiosa. Cuando estaba a punto de vivir una experiencia en un convento (literal a 3 días de irme con la congregación), me ofrecieron el trabajo de mis sueños. Para no hacer el cuento largo, tomé ese trabajo (en parte como 'escape' del convento). Años después, en medio del ajetreo del trabajo tomado, volvió la semilla de la vida religiosa, y 4 años después de aquel primer intento, pedí mi ingreso a la congregación (ahora ya no estoy en esa comunidad, pero... vivo en un convento sin ser monja, aunque esa es otra historia...). 'Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo'.
Y tal vez la sabiduría de Kung Fu Panda aplica para las sociedades también. En el 2018 se 'castigó' a los partidos políticos de siempre y se le dio la confianza del voto popular (al fin, pues vaya que el hombre perseveró) a Andrés Manuel. Muchos tal vez pensaron(mos) que dejaríamos de ser 'cachorros del imperio' (jiji), entre otras cosas, pero nada, ahora hasta más amiguitos de Trump somos. 'Encontrarás tu destino en el camino que tomaste para evitarlo'.
Definitivamente no creo que nuestro 'destino' sea ser 'el patio de atrás' de nadie, pero a lo que voy es que hay ocasiones en que 'todos los caminos llevan a Roma'. O que ciertas cosas 'iban a pasar sí o sí'. Voy concluyendo con esa coloquial frase de 'lo que es para ti, aunque te quites, y lo que no, aunque te pongas'.
¿Será que hay cosas que 'tenían que ser'? ¿Será que hay factores de personalidad, de historia de vida, incluso de geografía que limitan el abanico de opciones que tenemos, 'condenándonos' (benditamente, algunas veces) a no poder escapar de ciertas situaciones? ¿O serán solo cosas curiosas de la vida?
O tal vez solo espero demasiado de Kung Fu Panda...
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